Vivir es tropezar, caerse, levantarse… no se cae quien no intenta caminar. Las caídas duelen mucho mas cuando sabes que vas a caer… cuando presientes que pisaste mal… cuando vas embocando hacia el suelo y sabes que aunque te sostengas puedes lastimarte. Te aferras a lo que puedes y aun así te duele… Te cuestionas…¿cómo fue que tropecé? y nunca encuentras la explicación que te convence. Pero, con la fuerza que tengas, te levantas igual. Una usuaria reflexiona sobre este sentimiento y nos regala esta poesía.
Del cielo oscuro caí
he despertado y he visto tras la ventana
lo desconocido por lo que lloraba
y por lo que tanto sufrí.
Perdí todo recuerdo
Aunque mi oscuro pensamiento
A pasitos en mi mente camina aun sin aliento.
Perdí todo recuerdo.
he despertado y he visto tras la ventana
lo desconocido por lo que lloraba
y por lo que tanto sufrí.
Perdí todo recuerdo
Aunque mi oscuro pensamiento
A pasitos en mi mente camina aun sin aliento.
Perdí todo recuerdo.
Sufrí pues veo marcas
En mi corazón cerrado
no lo veré en su espejo
pero sí en mi alma, un agujero,
vacía dentro buscando consuelo .
Si en mis ojitos ves expresión alguna
te darás cuenta de mi sufrimiento
mi largo y constante lamento
mece una vez más mi cuna.
En mi corazón cerrado
no lo veré en su espejo
pero sí en mi alma, un agujero,
vacía dentro buscando consuelo .
Si en mis ojitos ves expresión alguna
te darás cuenta de mi sufrimiento
mi largo y constante lamento
mece una vez más mi cuna.
